Este escrito fue publicado en el grupo "Defensores de la fe", sobre el motivo de servir a Jehová, si por amor o la recompenza.
Y tienes que amar a Jehová tu Dios con todo tu corazón y con toda tu
alma y con todas tus fuerzas." (Marcos 12:31)
¿Por qué Jesús, al estar en la tierra, consideró que el mandamiento más importante era el citado en el encabezamiento de este tema? ¿Cuáles son las razones que deberían llevarnos a "amar a Dios sobre todas las cosas"? ¿Por qué sirvo yo a Dios?
Sin duda, hoy en día existen muchísimas personas que se consideran cristianos, inclusive, contamos por millones y por cientos de millones a aquellos que pertenecen a confesiones religiosas de diversa índole. Sin embargo, la decadencia moral, espiritual y la pérdida de valores que caracteriza este mundo demuestra que hoy más que nunca el amor por Dios se ha perdido o enfriado en la mayor parte de la humanidad. Sin embargo, todavía hay quien mantiene altos valores morales, predica la palabra de Jehová y ocupa algún cargo de responsabilidad o bien dentro de los Testigos de Jehová, o de otras confesiones religiosas. Sin embargo, nos adentraremos a considerarnos a nosotros mismos, los Testigos de Jehová.
Alrededor del mundo, ya son más de seis millones de individuos que participan de forma activa en la predicación de las buenas nuevas del Reino y se benefician del compañerismo de muchos hermanos sinceros que se pueden encontrar en las congregaciones cristianas. Y puesto que muchos de los miembros del foro somos Testigos de Jehová, miembros de la congregación, deberíamos preguntarnos ¿Por qué servimos a Jehová?
Muchos detractores de la obra, como podemos ver aquí mismo en nuestro foro, acusan a los hermanos de motivos egoístas a la hora de servir a Jehová. ¿Cómo? Burlándose de la sobreexpectación que muchas fechas han causado dentro del pueblo de Jehová acerca de la llegada del fin y que no se han visto realizadas. Por supuesto, dichos ataques resbalan en "nuestra armadura grande de la fe", sin embargo, vemos que muchos de aquellos que abandonaron la organización después de esos desencantos, ahora se convierten en los mayores perseguidores de la fe de sus antiguos compañeros, así, que para nosotros, los Testigos de Jehová que creemos que Él se encuentra con nosotros, la pregunta de los motivos de nuestro propio servicio es obligada. ¿Por qué?
Los opositores, muestran los datos estadísticos de los años previos, tomando un ejemplo, a 1975, donde muchos hermanos, incluyendo a miembros del cuerpo gobernante, creyeron que sería probable que hubiesen sucesos de importancia. En estos vemos cómo se produce un incremento notable de publicadores antes de dicho año, y como decrecen durante los años siguientes el número de estos. ¿Qué nos demuestran estos datos?
Hermanos, piensen por un momento. ¿Qué motivos tengo para servir a Jehová?
Seguramente, aquellos que están casados habrán despertado y saludado a sus respectivos cónyuges, de quien están enamorados. Aquellos que tienen hijos, sienten la alegría de verlos crecer y convertirse en personas mayores. Todos tenemos amigos, con los cuales pasamos buenos momentos. La gran parte de nosotros, hemos disfrutado de la bondad y paciencia que nuestros padres han tenido para con nosotros durante nuestra infancia y juventud. Quién no ha sentido la alegría del calor del sol, el roce del viento, el canto de los pájaros, las deliciosas comidas que tenemos por favoritas, del mar, de las montañas, de la nieve, de las diferentes culturas que, aquellos como yo, hemos tenido la suerte de conocer lugares tan diversos como Sudamérica, Europa y Africa, y tantas otras cosas y situaciones que alborozan nuestro corazón. ¿Gracias a quién podemos disfrutar ahora de la vida?
¡Gracias a Jehová, naturalmente! Por eso, vuelvo a repetirles una vez más: ¿Por qué sirvo a Jehová? Yo les diré el mío: porque cada vez que mi hijo sonríe, veo que Jehová me permite disfrutarlo; porque cada vez que me como un trozo de solomillo asado, que me encanta, es por la Bondad de Dios; porque cada vez que alguien me tiende una mano, es porque Jehová es quién ha tenido a bien que existamos; porque en todas las cosas buenas de la vida, en todo lo hermoso que hay en el mundo, en todo lo que he tenido ocasión de disfrutar se ve la bondadosa mano de Dios.
¿Y si mañana me dicen que el fin no llegará nunca o que tardará tanto que yo no lo voy a ver? ¿Me alejará esto de Jehová y de mis hermanos? ¡Jamás suceda eso! Hermanos, amigos, es cierto que Jehová tiene promesas para los justos, pero no es nuestro motivo para servirle. ¿Sabes por qué se fueron tantos cuando pasó el 75 y no vino el fin, como creían muchos? Porque ellos querían el premio, no amaban a Jehová por lo bueno que es ahora con nosotros. No, hermano, que no te confundan, ve a leer los comentarios de los que se fueron, sus páginas web, sus libros, cualquier cosa que digan, fíjate, que sólo se fijan en que si el fin no llegó cuando creyeron, que si tenemos tal o cual recompensa, que si el fin no va a llegar tan pronto, que si los "tiempos de los gentiles" son tal o cual cosa, en fin. Todo, absolutamente todo, encaminado a atacar la doctrina en cuanto al premio. ¿Sabes lo que quieren decirte? Te dicen que tú estás sirviendo a Jehová por lo que puedas sacar de beneficio, te dicen que si tú te dieras cuenta que el fin no es tan inmediato o tan pronto, dejarás de servir a Jehová. Y si te das cuenta, no es la primera vez que Satanás lanza esos ataques en contra de los siervos de Jehová. Job, tuvo que enfrentarse a aquellos que lo acusaron de servir a Dios por motivos egoístas, nosotros también. Pero tal y como hizo Job, debemos mostrar que deseamos que el Nombre de Jehová sea santificado, y que por el amor por lo que ya ha hecho por nosotros, le seguiremos sirviendo con gracias y amor por lo que nos ha dado.
En la última parte de este escrito, quizás se entienda que animo a leer páginas apóstatas, este escrito iba dirigido a personas que ya habían tenido contacto con dichas páginas y foros, y no es mi opinión que quien no ha leído dichas páginas deba hacerlo.